Llama a la puerta del adivino, y dentro se oye una voz que pregunta:
– ¿Quién es?.
Se marcha mientras comenta:
– Vaya un adivino…
Un caníbal con su hijo encuentran a Mis universo en la selva:
– Vamos a llevarla a casa con mamá, y nos la comeremos.
– Vamos a llevarla a casa, y nos comeremos a mamá.
Hacen la promesa de subir a Montserrat con garbanzos dentro los zapatos. Todos andan con dificultad menos uno que marcha tan tranquilo. Le preguntan como se las arregla para resistir el dolor de los garbanzos:
– A mí no me duelen, los he metido cocidos…
Al recién operado solo le dejan comer una cucharada de sopa y un garbanzo, cuando a terminado pide un sello de correos:
– ¿Para qué quiere el sello?. Le pregunta la enfermera.
– Después de las comidas me gusta leer un poco.
Era un hombre que no tenía nada suyo…
Todo era robado.
¿Cuál es el último pez?… El delfín.
En los barcos, como en la vida, es más importante obedecer que mandar bien. Puede elegirse para mandar al más viejo, al más experimentado, al más hábil, al de más graduación…
En caso de dudas que mande el más borracho.Así se ha hecho siempre en todas las marinas del mundo.
Tu padre es un proscrito. – El tuyo un Tigretón.
En el restaurante son tres que intentan repartirse un pollo. Como resulta de mal repartir, acuerdan hacerlo según el apellido.
– A Zapata le daremos la pata. A Zabala el ala. A Angulo…
– Yo tomaré otra cosa.
El niño pesado pedía a su padre una pistola, su padre le dice:
– Te he dicho mil veces que no te la compro y basta. ¿Quién manda en esta casa?.
– Tu, pero si tuviera una pistola…
¿Qué diferencia hay entre un hada y una bruja?.
– Veinte años de matrimonio.
Los hombres son como las cervezas:
Del cuello para arriba están vacíos.
No te fíes nunca de los cirujanos: siempre van con guantes, la cara tapada y un cuchillo en la mano.
Un matrimonio acude al cirujano:
– Verá doctor es que mi esposa tiene tres pechos, necesito sus servicios para… Que me implante otra mano.
En el restaurante, siempre tiro una mosca en la sopa. Si la mosca tiembla… es que la sopa está fría.
En la zapatería:
-¿Tiene zapatos de cocodrilo?. – Lo siento, pero no tenemos.
– Pues cocodrilo, te quedas sin zapatos.
Era una criatura tan fea, que la cigüeña… hizo otro viaje para disculparse.
El alumno recitaba lentamente el verbo caminar. El profesor le dice: – ¡Más rápido!.
– Yo corro tu corres…
-¿Le metiste seis polvos?. – No, solo uno, pero poco a poco.
El Genio de la Suerte era un sueño.
La hormiga macho se folla a una elefanta. La elefanta muere de gusto. Mientras la está enterrando piensa:
– Una sola noche de amor y toda una vida cavando…
El parte meteorológico anuncia grandes tempestades.
El creyente dice:- Debemos confiar en la misericordia de Dios.
Empieza el temporal y los bomberos mandan desalojar el barrio.
– Nosotros no nos vamos porque confiamos en Dios. Les contesta.
El barrio está completamente inundado, el creyente y su familia en el tejado de la casa. Acude un helicóptero a rescatarles:
– Pueden irse tranquilos que Dios cuida de nosotros.
Toda la familia mueren ahogados. Llegan al cielo y se quejan:
– Señor, confiábamos en Ti, y nos has dejado perecer.
– ¿Cómo que te dejé perecer?. ¿Acaso no te avisé por el servicio meteorológico?.¿ Y después no te mandé; a los bomberos, una barca, un helicóptero?…
A causa del divorcio perdió quince quilos de grasa…
¡Los de su mujer!.
Era una iglesia tan estrecha que tenían a Jesucristo firmes…
No cabía el crucifijo con los brazos extendidos.
Era un Water tan estrecho, que en vez de rollo de papel…
Tenían una serpentina.
La niña a su amiga:
– Me gustaría tener la regla… para poder nadar, montar a 0caballo, esquiar…
El marido llega a casa y dice a su mujer:
– Mira que cosa más rara, meo champaña.
– Que suerte, voy enseguida a buscar un vaso.
– Mejor será que bebas a morro.
El inglés que vivía cerca del lago Nes llega a Lepe y dice:
– Vaya mierda de fresas y vaya mierda de pueblo.
El de Lepe le contesta:
– Vaya mierda de turista y vaya mierda de monstruo.
-¿Quién es?. – Traigo una pizza.
– Pues la prisa es mala consejera.
Era una pizza de cuatro estaciones… De tren.
El Atlético de Bilbao es el equipo del futuro…
Su mallot parece un código de barras.
Yo en la cama me gustaría ser como una leona en la selva…
Para sentirme libre.
El primer día de casados, le serví el desayuno en la cama, a mi esposa. Después la dije: Cada día quiero que me lo sirvas así.
El único animal que hace el amor con luz son las focas…
Hacen el amor con los “focos”.
Una mujer a su amiga:
– No puedo dormir del lado derecho porque me sube el hígado. Del lado izquierdo me sube el riñón. De boca abajo me sube el estómago…
– Tendrás que dormir boca arriba.
– De ninguna forma, entonces sube mi marido.
Los indígenas no plantaban nunca palmeras…
Les daba miedo el “coco”.
Tarzán reúne a todos los animales de la selva y les dice:
– Tenemos la selva hecha una porquería. A partir de mañana abriremos una gran zanja y quiero que todos los animales hagáis vuestras necesidades en ella.
Al cabo de unos días descubre a un conejo haciendo sus necesidades en plena selva. Lo llama y le dice:
– ¿Es que no te enteraste, que se tenía que ir a la zanja?.
– Sí que me enteré pero no pienso ir más a la zanja, porqué el otro día estaba en ella y a mi lado tenía al Hipopótamo, y me pregunto.
¿- ¿Tú eres de los que deja pelusilla?.
– Le conteste que no…
Entonces me agarró y se limpio el culo conmigo.
Desde que se divorció no podía dormir…
Se le llevó la cama su mujer.
¿Qué es un “menaje a trua”?.
– Lo que podrás hacer si te vas a casa corriendo.
Las medidas perfectas del hombre son 60-2-80.
60 años 2 infartos 80 millones.
En la notaría haciendo testamento:
– Dejo los pisos de Pedralbes a mi hijo Juan, los de la Villa Olímpica a Carlos, los de Sarria a Andrés…
– ¿Es usted multimillonario?.
– No, soy repartidor de Butano.
El niño negro al que dieron bombones, se comió dos dedos.
El novio está en casa de la novia. De pronto se funden los plomos, todo queda a oscuras y ella le dice a él, en voz baja:
– Aprovecha ahora… El novio les robó el televisor.
¿Los embutidos engordan?. – Solo tienes que mirar a los cerdos.
El ventrílocuo contaba chistes de Lepe.
El Alcalde de Lepe sube al escenario, muy molesto, y dice:
– Tiene que saber usted que yo soy de Lepe y me molestan mucho sus chistes.
El artista le contesta: – Perdone usted, pero solo es una broma.
– Usted no se meta que estoy hablando con el muñeco.
Otro artista que contaba chistes de Lepe.
El Alcalde de Lepe sube al escenario, muy molesto, y le dice:
– Tiene que saber usted que yo soy de Lepe…
– No se preocupe, a usted, ya se los contaré dos veces, para que pueda entenderlos.
Las cucarachas son pequeñas y negras porque…
Si fueran grandes y grises, serían elefantes.
Me gustan las bailarinas… Porqué se abren mucho de piernas.
Un vidente… Es una persona con dos dientes.
No hay nada tan derecho, como El Derecho.
– Mi yerno llegó a casa y me metió tres polvos seguidos.
– ¿Y no le dijiste nada?.
– Claro que no, si hace más de tres años que no nos hablamos.
Un hombre le cuenta a su amigo:
– Queríamos ingresar, mi esposa y yo, en una Congregación Religiosa, pero nos pusieron como condición, que durante un mes teníamos que abstenernos de mantener relaciones sexuales. Cuando ya hacía veinticinco días que nos aguantábamos, mi esposa se agachó para coger una lata de judías, yo al verla en esta posición no pude contenerme más y allí mismo la poseí.
– ¿Os expulsaron de la Congregación?.
– ¡De la Congregación y del supermercado!.
Era un hombre tan feo que el gorila del Zoo le pidió el nombre de su abogado.. Para que le consiguiera la libertad.
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Todos los soldados habían llegado tarde al cuartel. El sargento les preguntaba el motivo y todos contestaban:
– Es que salí del pueblo a caballo, le hacía ir tan aprisa, que el pobre caballo murió reventado. Como tuve que continuar a pié, por eso llega tarde.
Cuando llega el último el sargento ya está escamado con la escusa y le dice:
– ¿Supongo que usted llega tarde porque se le murió en caballo por el camino?.
– No señor, yo llego tarde, por qué tuve que rodear un enorme montón de caballos muertos, que había en el camino.
Todos los soldados llegan tarde al cuartel y el sargento los va arrestando. Cuando llega el tartamudo el sargento está tan nervioso que le manda que se calle y se largue.
Cuando sale del cuerpo de guardia todos los demás soldados quedan extrañados de que los haya arrestado a todos menos a él:
– Es que no sa-sa-sabeis ex-ex-explicaros.
En la tienda que no querían talones…
Todo el mundo entraba de puntillas.
– ¿Qué te ha recetado el doctor?.
– Un purgante, porque me ha dicho que tenía el vientre sucio.
– Menos mal que no te ha visto los pies, si te los ve…¡Te opera!.
-¿Quién és?.
– Las Hermanas de Cristo.
– ¡Sí que se conservan jóvenes!.
– Dénos algo para el asilo.
– ¿Quieren al abuelo?.
Al pintor de Lepe le ponían papeles en el suelo y decía:
– No se preocupe que ya llego.
Era tan tonto que para decir tres decía: uno, uno, uno.
En Lepe tiraban migas de pan en la pista de aterrizaje hasta que les dijeron:
– No se preocupen, que los aviones ya bajan solos.
Mi mujer en la cocina es un sol… Todo se le quema.
El borracho se unió a la carrera cuando…
Le dijeron que corrían por una copa.
El paquete de los toreros es tan grande…
Porqué es donde guardan las pilas para el traje de luces.
– ¡Esta mujer es una víbora!.
– No lo creas, todo lo más, ¡un gusano cabrito!.
– Mi madre es “Sustituta”.
– ¿En qué consiste esta profesión?.
– Llegan los ejecutivos a mi casa con un portafolios, se encierran en la habitación con mi madre, y al salir le dan mucho dinero.
– Esto se llama ser “Prostituta”.
– No, no, la prostituta es mi tía que ha cambiado de piso.
El turista llega a Ibiza y la primera persona que encuentra es un negro:
– Perdone, ¿cuantos días lleva en la isla?.
– Dos.
– Caray, yo que tengo que estarme una semana.
La diferencia entre una niña y una mujer es que:
A la niña la llevas a la cama y tienes que contarle un cuento.
A la mujer tienes que contarle un cuento para llevarla a la cama.
Desearía que mi suegra fuera una estrella…
Para tenerla a 30.000.000 de kilómetros.
– Mi padre me enseñó a lavarme las manos cada vez que voy al lavabo.
Mi padre me enseñó a no mearme en las manos y no tengo que lavarlas.
“Al Barça” lo llaman “Chiquito de la Calzada”…
Porqué el entrenador dice: “Al ataque”….Y los jugadores dicen: “No puedo, no puedo”.
El pueblo tenía siempre el mismo número de habitantes…
Nacía un niño y huía un hombre.
-¿Las vacas fuman?. – Pues se está quemando el corral.
El niño lloriqueando:
– ¡Papá cómprame una gorra!.
– ¡Callate niño, o te romperé la cabeza!.
– ¡Para no tener que comprarme la gorra!.
-Papá, de mayor, ¿seré como tú?.
– Sí, hijo mío.
– ¡Pues ya no quiero crecer más!.
El Psiquiatra a los padres del niño terrible:
-Ya tengo la solución, se mudan de piso y no le dan la dirección.
Beso en árabe: Saliba va, saliba ve.
– Por poco no mato a la suegra con el coche.
– ¿Te fallaron los frenos?.
– No, el acelerador.
Los borrachos no se pueden incinerar… Queman demasiado.
– Papá, ¿para qué sirve esto?.
– No lo sé.
– ¿Y aquello?.
– no lo sé.
– niño, no molestes a tu padre.
– Mujer, deja al chaval que aprenda.
Discurso del alcalde de Jaén a los olivareros durante la crisis de 1998.
– Y en el tema de las subvenciones al olivar hemos podido comprobar que los “europedos” pierden aceite.
¿Porqué les llamaran funcionarios si no han funcionado nunca?.
¿No vas al paro?. – no, ya tengo.
A mi esposa la quiero… Cambiar.
– Estoy enfermo porque son unos “ingratos” y “cabrones”.
– Que no Pepe. Lo que tienes mal son los “Hidratos de Carbono”.
En un barco:
– ¡No vamos a pique!, ¡nos vamos a pique!.
– Lo rápido que cambian de idea los marinos, yo creía que ibamos a Barcelona, bueno, pues iremos a pique y a Barcelona.
Un hombre cuenta a su amigo:
– Mi esposa hace unos días que está de una suerte fantástica. Un día llegó a casa con un abrigo de pieles que se había encontrado, otro día con un reloj de oro, al día siguiente con un collar que también se había encontrado.
Yo en cambio estoy de muy mala suerte, ayer me encontré con unos calzoncillos dentro de la cama y no eran de mi talla.
La monja pregunta a la niña:
– Si te encuentras en la calle, a uno de estos hombres, que dan caramelos a las niñas, ¿qué vas a hacer?.
– Me subiré las faldas a la cabeza y le bajaré los pantalones.
– ¡Pero niña!, porqué harás una cosa así.
– Porqué con los pantalones caídos, no podrá perseguirme y yo con las faldas en la cabeza, podré correr el doble.
Va a un baile de trajes completamente desnuda y pintada de blanco
– ¿De qué vas disfrazada?.
– De diente cariado. ¡Fíjate que agujero tengo¡.
Las viudas han matado a sus maridos como si fueran cucarachas…
A polvos.
Encuentra a su amigo por la calle con un saco de conejos.
– ¿Para qué quieres tantos conejos?.
– Para ganar mucho dinero.
– ¿Estás seguro que con los conejos se puede ganar dinero?.
– ¡Ya lo creo!. Me han dicho que mi vecina, con uno solo, ya se ha comprado tres pisos.
Mucho peor que tener el SIDA es tenerla pansida.
El dueño del bar tiene que salir a un recado, le pide a su amigo, que le sustituya una tarde al frente del mismo.
Le dice que solo tendrá por clientes un grupo de mudos. Que es muy fácil despacharles, porque solo levantan un dedo y quiere decir que quieren una cerveza, si levantan dos dedos, quieren dos cervezas etc.
Se queda el amigo, llegan los mudos, empieza a servirles cervezas.
Todo parecía marchar bien, hasta que ve horrorizado, que le rodean con la boca abierta.
Asustado telefonea al dueño del bar pidiendo ayuda.
– No te preocupes, se han emborrachado y están cantando.
Un pescador al otro:
– Ayer pesqué una trucha de 500 kilos.
– Pues yo una moto del año 1.945. y aún tenía las luces encendidas.
– No me estarás contando una mentira demasiado gorda.
– Bueno, si tú me sacas algo de la trucha, yo iré a apagar las luces de la moto.
– Me echaron del cuerpo de paracaidistas por antipático.
– No puede ser.
– Te aseguro que me echaron, porque les “caía mal”.
Las pastillas Biagra entrarán por el seguro.
Los catalanes podrán escoger entre un tubo de estas pastillas o su precio que es de 80.000 pesetas. Porque han notado que a los catalanes les pone más cachondos el dinero que las pastillas.
Le habían dicho que la RENFE disponía de unas máquinas de expender billetes ultramodernas y decide comprobarlo.
Va a la estación, se coloca delante de la maquina expendedora y esta le dice:
– Se llama Juan Martínez y desea un billete para la estación de Sans, para el tren de las cinco.
Impresionado decide disfrazarse, para comprobar si la máquina es capaz de reconocerlo. Se pone unas gafas negras, un bigote y un sombrero, se coloca de nuevo delante la maquina.
– Se llama Juan Martínez, desea salir con el tren de las cinco hacía la estación de Sans, no le doy el billete, porque ya lo tiene de antes.
Decide disfrazarse de viejecita y acude otra vez a la máquina.
– Se llama Juan Martínez y ya tiene billete para ir a Sans, pero no podrá ser con el tren de las cinco…
Porque ya hace media hora que ha salido.
No era fea… Solo tenía la belleza distraída.
En la barbería el cliente pregunta:
– ¿Afeita todo lo que remoja?.
– Sí señor.
– Pues ya puede empezar por los cojones.
El financiero que se acaba de arruinar llega a casa y le dice a su esposa:
– Si aprendes a cocinar podremos despedir a la cocinera.
– Y si tu aprendes a amar podremos despedir al jardinero.
El empresario denunció a sus obreros por, “Acoso Mensual”.
Había un herrero que tenía por costumbre, arrimar mucho la bragueta al yunque mientras golpeaba con el martillo.
Su compañero de trabajo le pregunta:
– No tienes miedo de golpearte los cojones con el martillo?.
– Los cojones seguro que no, porque los tengo por corbata.
La fábrica de clavos decide empezar una gran campaña publicitaria de sus productos. El primer proyecto que le presentan consiste en un gran cartel con un crucifijo y el siguiente eslogan:
– Con clavos Martínez, no se escapa ni Dios.
La dirección de la fábrica, decide que hay que cambiar el proyecto, ya que puede herir la sensibilidad del público.
Entonces presentan el segundo proyecto, que consiste en una cruz desnuda y el siguiente eslogan:
– Con clavos Martínez esto no habría pasado.
Quiero morir como mi abuelo, el taxista, tranquilo en la cama, no gritando como sus clientes.
En el concilio deciden que los curas pueden casarse, pero no el Santo Padre. El motivo es que ahora dicen los feligreses, cuando se refieren a él: Su Santidad El Papa.
Después pudrían decir: Su Santidad, (la mama).
La gallega le decía a su amiga:
– Los hombres no sirven para nada. Te joden mucho y te follan poco.
Una mujer cuenta a sus amigas, que los huevos de su marido están fríos. Todas deciden comprobarlo menos la tímida.
Un día aparece con la cara hinchada. Todas le piden la causa:
– Veréis, es que decidí comprobar, lo que me contabais de vuestros maridos y al tocarle los huevos a mi marido le dije: tienes los huevos fríos igual que Jaime, Luis Juan…
Ya no pude acabar de explicarle.
1997 fué el Año Internacional de la Mujer. Se reúnen las representantes de todo el mundo y dice la alemana:
Antes los hombre no ayudaban en casa, ahora ya empiezo a ver un pequeño cambio en mi marido, ya empieza a ayudar.
La francesa continua:
– Yo también empiezo a ver pequeños cambios en mi marido.
Y la andaluza:
– Yo también empiezo a ver con este ojo, el otro aún lo tendré unos días hinchado…
Violan a la tonta del pueblo. Llega a su casa y dice:
– Me apretaba la barriga con una cosa muy dura, suerte que me ha acertado el agujero de mear, sino me revienta.
Tiraba piedras a la luna.
Nunca consiguió alcanzarla.
Pero sí logró…
Ser el que más lejos tiraba las piedras.
Oído en la Cena Homenaje al Sr.Juan Viñas Bona.
Hay muchas viñas…
Pero no todas son bona.
He tenido mucha suerte, los mejores me han elegido a mí.
Dios creaba al Hombre con sus Manos.
El Hombre tenía ganas de Ser.
En un descuido, el Hombre escapó de las Manos de Dios.
La Mano Derecha Decía a la Mano Izquierda:
Tenías que sujetarlo mientras yo lo terminaba.
Eras tú la que tenía que sujetarlo mientras yo lo terminaba.
Dios dijo a sus Manos:
No discutáis ni tengáis temor por el Hombre:
Él sabrá terminar de formarse.
La verdad es lo que es, y sigue siendo verdad, aunque se piense al revés.
– Estuve gravísimo, figurate, que llegué a los ochenta grados de temperatura.
– Serian cuarenta grados.
– ¡Cuarenta en cada brazo!.
Se reunían todas las monjas, por la mañana, e iban desfilando por delante la madre superiora y decían:
– Me ofrezco a Vuestra Reverenda Madre, para hacer todos las tareas que Vd. disponga.
La novicia en vez de decir esta frase, hacía un gesto como de desprecio.
La superiora la llamó aparte y le preguntó:
– ¿Qué significa este gesto?. ¿Porqué no dice la misma frase, que las demás hermanas?.
– Es que cuando entré en el convento, me propuse no decir ninguna mentira.
– ¿Y está resentida conmigo?.
– No Reverenda Madre, Vd. Es muy buena conmigo… Si no digo la frase de ritual es porqué yo no meo fresco… yo meo caliente y con espuma.
Se había derrumbado un edificio de cinco plantas y sobre las ruinas había un pobre viejo sentado y riendose a carcajadas.
Todos los vecinos acudieron corriendo y le preguntaban cuál era el motivo de su risa.
El pobre entre carcajada y carcajada pudo decirles.
– Estaba sentado en el water de mi casa, en el quinto piso, cuando tiré de la cadera… Se derrumbó todo el edificio.
Salomón quan profesá
donar probes que era sabi
tancan dintre l´armari
tote l´aigüa del Jordá.
I per més demostrar
gran sabiesa y talent
va descubrir l´aigüa ardent
enterrat en unes mines
de les isles Filipines
a casa d´un seu parent.
Era de noche, el sol con sus rayos helaba la tierra.
Iba yo solo, con tres de mis compañeros.
Nos sentamos en una piedra de madera.
A la luz de una vela apagada.
Descubrimos el cadáver de un ser viviente.
Sacando de mi bolsillo un cuchillo, que no tenía ni filo ni mango
Le dí tres terribles puñaladas.
Entonces el cadáver me contestó:
¡Aaaah! Sinvergonzón, me has matado a traición.